Empezó la Cumbre sobre el Cambio Climático en Copenhagen, la capital de Dinamarca, esa pequeña península europea al norte de Alemania, en donde esperemos que los dichos empiecen a dar lugar a los hechos, y que las intenciones se transformen en acciones.
El cambio climático es consecuencia de muchos años, y si no actuamos ya, no tendremos tiempo para revertir sus efectos. Los lugares en donde las lluvias eran ¨normales¨ ya se han convertido en lugares de grandes tormentas , lluvias fuertes e inundaciones, y aquellos en donde había algunos y solo algunos períodos de sequía, éstas se han extendido por mucho más tiempo y abarcando más superficie. Nuestro país es un ejemplo concreto de ello, en el litoral y en el centro.
Los gases que retienen calor en la atmósfera, al aumentar en los últimos 60 años a un ritmo sostenido, sin freno, han provocado que la mínima variación en la temperatura rompa el equilibrio climático del planeta, y nos hace pensar que no es tan loco lo planteado en ¨El día después de mañana¨ . Y si no, vean los puntos de contacto con el documental ¨Una verdad incómoda¨ , o la realidad misma: se derriten los glaciares en Groenlandia, se desprenden porciones de la Antártida, las montañas africanas se quedan sin nieve, y la lista sigue.
Ojalá los grandes políticos logren acuerdos que luego las grandes empresas cumplan , y que las nuevas energías, que no afecten al clima, comiencen a poder ser utilizadas por todos nosotros, quienes además de pedirles a esos líderes que hagan algo, también colaboremos con las cosas cercanas, mínimas, desde no tirar papeles al piso a separar la basura, o consumir luz y agua responsablemente.
Esperemos que ahora sí arranque una nueva etapa, por nuestro propio bien, y por las generaciones que vienen.
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